P.O.B. 186 9100101, Gerusalemme (Israele)

Suscríbete a nuestra newsletter

Para estar al día

    logo main logo dark logo light

    HABÉIS SIDO RESCATADOS
    A UN ALTO PRECIO


    “HABÉIS SIDO RESCATADOS A UN ALTO PRECIO”  (cfr 1Cor 6,20)                                                      

    Queridísimos amigos de Getsemaní, ¡el Señor os conceda su Paz! 

    En estos días los ojos de todos están puestos aquí, en Oriente Medio, en esta frágil tregua, por la que os pedimos que prolonguéis vuestra oración de intercesión hacia Aquel que todo lo puede. 

    Se habla mucho del 'intercambio' de prisioneros, cada uno parece narrar su propia victoria, cuando en realidad sabemos que todos estamos perdiendo ante el deseo del verdadero Dios, ¡que no quiere la muerte y el sufrimiento de nadie! Me parece que todos nosotros somos de alguna manera 'rehenes' de la mentalidad del mundo que insistentemente se nos propone como alternativa, sin Dios. Las imágenes de la guerra son instrumentalizadas por cada parte, tanto que, como en todo conflicto, la primera víctima es la verdad. No hablamos de la verdad humana, aunque es siempre necesaria para poder entablar relaciones de justicia, sino de la Verdad sobrenatural, que nos ha manifestado ¡la imagen verdadera que cada uno de nosotros lleva en su rostro! No solo la propia historia personal y de pertenencia terrenal, sino la imagen y semejanza que Dios ha imprimido indeleblemente cuando nos pensó y creó. Si nos escuchamos bien en lo profundo de nuestra conciencia, resplandece esta luz y esta verdad, realidad mucho más fuerte que toda pertenencia, "lengua, pueblo y nación" (Ap 5,9). Tal concepto quedaría abstracto y relegado a la casta de unos pocos gnósticos ilusorios, si el Altísimo no se nos hubiera manifestado a nosotros en el misterio de la Encarnación del Hijo: Jesucristo. Esta es la fe que toma de la mano a todo ser humano y nos diferencia de todas las demás religiones. A nuestro Dios lo vemos en la persona de Jesucristo. Él es el Cordero inmolado que realiza el gran rescate y nos salva (cfr. Ap 5,12). 

    En la poderosa profecía de Isaías, Dios afirma: "No temas, porque yo te he redimido, te he llamado por tu nombre; tú me perteneces. (...) Porque tú eres precioso a mis ojos, de gran precio y yo te amo" (Is 43,1.4). San Pablo, en una mirada totalmente iluminada por la Pascua del Hijo de Dios declara: "Habéis sido redimidos a un alto precio" (1Cor 6,20). Este rescate divino penetra en nuestra humanidad y, maravillándonos, debería llevarnos a la rendición de toda idea de conquista y de pretensión. ¡El Misterio de la Salvación nos supera! (¡por la gracia de Dios!). 

      ¡Todos somos preciosos a sus ojos! Pedimos poder crecer en esta conciencia que viene de la fe en este Dios que, AQUÍ, ha sudado sangre por nosotros (cfr. Lc 22,44), para poder regocijarnos, alabarlo en cada respiro o suspiro, para poder llorar y esperar, para poder encontrar al Amor ¡que nos ha amado con amor eterno! 

    El Cardenal Robert Sarah, en la presentación de su último libro, afirmó: "¡El mundo está muriendo porque le faltan adoradores! La Iglesia está desierta por la falta de adoradores" (¿Dios existe? El grito del hombre que pide salvación, Cantagalli). En nuestra adoración al Santísimo Sacramento, o en el lugar donde nos encontremos, sigamos orando y adorando al Señor. Necesitamos adoradores! ¡Intentemos dialogar con ese rostro del Hijo amado y dejar que nos diga su deseo sobre cada uno de nosotros!  ¿Qué diría? 

    Que María Santísima interceda por nosotros, necesitados del Esposo y sedientos del vino eterno! (cfr. Jn 2,3). 

    Buena oración, 

    Sed bendecidos en el Señor

    Hora Sancta

    Somos los hijos de Francisco, custodiamos por voluntad de Dios uno de los lugares más queridos por Jesús: el jardín llamado GETSEMANÍ. Es un lugar único en el mundo: el lugar donde el Señor manifiesta su Sí para siempre con su disponibilidad para entrar donde jamás ha entrado nadie, el lugar donde se hunde en la oscuridad, en su última batalla contra la muerte, por la que la Humanidad siempre ha resultado vencida.

    Seleccione su idioma
    Espanol Italiano English Francais Portuguese Deutsch Polish